Fíjate bien
Deportes de alto riesgo
Hace unos días el nadador David Meca, el campeón del mundo de 25 kilómetros en aguas abiertas, logró un hito histórico al convertirse en la primera persona que cubrió a nado la distancia entre la Península Ibérica y las Islas Baleares. La aventura requirió más de un día de esfuerzo interrumpido hasta cubrir los 110 kilómetros que separan Jávea de Ibiza.
No cabe duda que es una auténtica hazaña que puede llevarse acabo sólo por las personas fuertes, valientes y físicamente preparadas. El estado de Meca al finalizar su trayecto fue impactante. El nadador llegó desfallecido al puerto de San Antonio y necesitó ayuda para salir del mar y mantenerse en pie. Meca tuvo que ser trasladado inmediatamente al hospital, donde ingresó con la hipotermia y las quemaduras en la cara que sufrido como consecuencia de las picaduras de medusa. Fue una durísima travesía que duró unas 23 horas.
Al ver las impactantes imágenes de la llegada del nadador a la meta y su estado de salud, empecé en pensar en la razón por la que la gente arriesga su vida y se propone unos retos difíciles de conseguir. Puede que necesitan sentir la adrenalina en la sangre y estar al límite, luchando por su sueño. Desde luego son personas muy atrevidas, aventureras y valientes.
Pero los deportes de riesgo no sólo se practican por los deportistas profesionales, sino cada vez más por la gente normal y corriente que quiere salir de la rutina y experimentar esa sensación entre el miedo y la diversión. El rafting, el paracaidismo, la escalada, el esquí extremo, el alpinismo, el barranquismo son algunas de las actividades que conforman el "turismo activo".
Hay que decir que buena parte de los deportes de riego derivan de actividades deportivas clásicas. En Estados Unidos, el conjunto de actividades deportivas de riesgo se agrupa bajo el nombre de "extreme games" (juegos extremos). Algunos de estos deportes de riego no incluyen como principal objetivo la competición, sino más bien la diversión.
Un buen ejemplo de este fenómeno es el esquí extremo: se practica sobre nieve virgen, partiendo de picos casi inaccesibles, para llegar a los cuales se precisan helicópteros. El paracaidismo, por su parte, ha permitido desarrollar la caída libre, que se efectúa a gran altitud y en la que el paracaidista permanece varios minutos en el vacío antes de abrir el paracaídas; eso cuando no se practica el "paracaidismo relativo", en el que equipos de cuatro u ocho saltadores efectúan un número indefinido de formaciones en el aire en un tiempo predeterminado.
El parapente es una versión del paracaidismo que aporta mayor control y gran capacidad de vuelo al paracaidista al haber sustituido la tradicional forma de media naranja invertida del paracaídas por otra casi rectangular. El alta delta es un sistema de vuelo de fundamentos relativamente sencillos, que en cierta medida recuerdan a las cometas infantiles: se sirve de una superficie de tela muy amplia, con forma de delta, y parte de lugares elevados para planear. Otra actividad no competitiva en sus orígenes es el puenting, que consiste en lanzarse al vacío desde lo alto de un puente sin más sujeción que una cuerda elástica atada a los pies por medio de arneses.
El monopatín, inspitado en realidad en una tabla de surf a la que se incorporan ruedas para deslazarse sobre el asfalto, ha desarrollado varis actividades de riesgo. Desde el llamado "medio tubo", que consiste en una instalación con forma de cilindro partido por la mitad sobre el que los patinadores efectúan diferentes combinaciones de saltos y giros.
Los deportes acuáticos han desarrollado diferentes actividades de riesgo: desde las carreras de offshore, auténticos Fórmula 1 que se deslizan sobre el agua, a las de aerodeslizadores hovercrafts, que se desarrollan sobre agua y tierra. También para este tipo de deportistas se ha desarrollado el esquí acuático sin tabla, con los pies descalzos. Mayor peligro aún entraña el skysurf,
el que el paracaidista salta sobre una tabla similar a las utilizadas en el surf enganchada a sus pies.
Como podemos hay una variedad enorme de los diferentes tipos de deporte de riesgo. Pero no quedan muy claros los motivos por los que mucha gente juega con su vida. Es realmente sorprendente y asombroso. Puede que quieren salir de la rutina y experimentar nuevas sensaciones. Desde luego la persona es un ser muy complejo.
